EL TRIBUNAL FEDERAL DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE.

Joaquín Ortega Arenas.

Desde hace más de un año que un querido abogado, viejo amigo mío se ha dedicado a averiguar cuál es el peor tribunal federal en México. Ha recibido más de mil respuestas y lleva meses poniéndolas en orden, por materias y por ubicaciones. Despertó mi curiosidad y voy a relatarles el resultado final de su encuesta.

En el primer lugar, es decir, el peor Tribunal de la República ha resultado el TRIBUNAL FEDERAL DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE.  ¿Pero porque ese tristísimo merito?

Su misión es resolver los conflictos que surgen entre el  Gobierno Federal y  los trabajadores a su servicio. Y, 

I.-  TIENE UN RETRASO DE MAS DE DIEZ AÑOS EN PROMEDIO,   en la tramitación de los expedientes y quejas que se le presentan y, es terriblemente notorio que ¡JUSTICIA DIFERIDA, NO ES JUSTICIA!

II.-   Su  personal, competente en general,  es incapaz, por la cantidad de asuntos que debe resolver,  ya que hay un secretario para cada trescientas promociones diarias. Una persona con plena capacidad no puede estudiar y resolver más de treinta al día, por lo que están pendientes de acuerdo varios cientos de miles de promociones.

III.-  ¡No debes patear el pesebre!  Señala un viejo refrán.  Es el Gobierno Federal el que paga a todos los funcionaros y trabajadores al servicio del tribunal,  y de cien sentencias que dicta en casi seis meses,  noventa y cinco  son desfavorables a los trabajadores y, si bien,  casi todas son corregidas por los Tribunales de Circuito en Materia de Trabajo,  la tramitación del juicio de amparo Directo requiere de cerca de un año en cada caso.

IV.- ¡Y viene lo peor! . Los actuarios que deben notificar las resoluciones, son independientes del Tribunal y sus tarifas ( prohibidas legalmente) son elevadísimas. Un trabajador que lleva despedido, por ejemplo, cinco o seis  años,  en los que ha vivido de milagro,  normalmente no tiene dinero para cubrir esos gastos y …la ejecutoria que envió la justicia federal,  jamás se notifica a las partes.

V.-   Mi curiosidad creció, y me dediqué a ver las listas de acuerdos.  Por poco me pongo a llorar. Los expedientes que se listan, tienen en lo general más de  diez años en trámite.

VI.-  Ninguna prisa tiene el Tribunal en cumplir con las ejecutorias de la Justicia Federal, y lo demuestra con un espantoso “tortuguismo”. La cuantificación, cuando el Laudo dictado impone pagos en efectivo, es más larga que las colas que se forman en las calles cuando les regalan algo a los hambrientos. Un litigante estaba consultando un expediente, y me acerqué para ver la causa del enojo que era visible, tenía.  La Justicia Federal condeno a una Secretaría de Estado,  a cuantificar  el monto de la pensión del trabajador ….hace  DIECIOCHO AÑOS, y “… no ha habido tiempo para hacerla. …”

¡Solo los conflictos agrarios  duran tanto tiempo. Concluí hace algunos años un conflicto que me había encomendado el Maestro Isidro Favela,  por las tierras del  Pueblo de Atlacomulco, Estado de México ,  que la Corona “…encomendó a Francisco de Villegas para la evangelización y cuidado de los naturales…” allá por el año de 1529 y,  que señalaba como uno de los linderos,  “…el lugar en que pastan los burros…”.

 Los descendientes del encomendero, fueron ampliando el llano donde pastaban los burros sobre los terrenos del Pueblo de Atlacomulco, ( Ātlacomōlco (< ā-tla-comōl-co) viene del Náhuatl]], compuesta de ā- 'agua', (tla)comōl(li) 'pozo, agujero grande, barranco' y -co (]]caso locativo|locativo]]), y significa "Lugar entre pozos de agua" ), y los naturales denunciaron el abuso en contra del poseedor en 1612, un tal  Gaspar de Oña y Osores.,…. pero los campesinos,   son personas con una gran paciencia…”  y lograron recuperar sus tierras en 1952.

¡  DEFINITIVAMENTE Y SIN TAPUJOS,  DEBO CONFESAR QUE  POR LO QUE VI Y AVERIGÜE , EL TRIBUNAL FEDERAL DE CONCILIACIÓN Y ARBITRAJE ES, APROVECHANDO MI LIBERTAD DE OPINAR,   EL PEOR DE LOS TRIBUNALES QUE HE CONOCIDO EN MI VIDA ¡ y, ya casi tengo noventa años! . ¡Hasta imagino  que pretende arrebatar ese título  a los Tribunales agrarios!