26 DE JULIO DE 1953. EL ATAQUE AL CUARTEL MONCADA.

Joaquín Ortega Arenas. Hoy, hace 57 años que un grupo de jóvenes cubanos, hastiados de la dictadura del tonto útil de la mafia extranjera que manejaba desde hacía años a la Isla de Cuba, el ex sargento del ejército, Fulgencio Batista, atacaron el Cuartel Moncada, ubicado en Santiago, próspera ciudad asentada en el Oriente de la Isla en la que reposan los restos de José Marti. El ataque fue un fracaso y detenidos los atacantes, encabezados por el recién egresado de la Escuela de Leyes, Fidel Castro Ruz, que en un discurso pronunciado en su defensa que denominó ”La historia me absolverá”, hizo un patético relato de lo ocurrido en la vieja fortaleza, en el que señaló “…El cuartel Moncada se convirtió en un taller de tortura y de muerte, y unos hombres indignos convirtieron el uniforme militar en delantales de carniceros. Los muros se salpicaron de sangre: en las paredes las balas quedaron incrustadas con fragmentos de piel, sesos y cabellos humanos, chamuscados por el disparo a boca de jarro, y el césped se cubrió de oscura y pegajosa sangre. ...yo sé que sienten con repugnancia el olor de sangre homicida que impregna hasta la última piedra del cuartel Moncada…” Pese a todo, después de una aventura peliculesca que incluye una estancia en México de los líderes del ataque al cuartel liberados quién sabe por qué, estancia en la que vivieron de verdadero milagro como fotógrafos callejeros, trabajadores de la Línea de Autobuses México Coyoacán, hasta que consiguió un pequeño yate de 18 metros, el Gramma, en el que hacinados 82 correligionarios partieron del puerto de Tuxpan. Después de una terrible travesía la nave llegó a su destino el 2 de diciembre . Lo esperaban las tropas del dictador Batista. Sólo subsistieron al ataque doce de los viajeros entre los que se contaron Fidel y su hermano Raúl, Camilo Cienfuegos, y el médico de la expedición Ernesto Guevara, de nacionalidad argentina a quien por ello motejaban como “el Che”. Escaparon y se fueron a refugiar en la Sierra Maestra, en donde el Ché, fue escribiendo la aventura, publicada después como “ Pasajes de la Guerra Revolucionaria”. Trocó su profesión de médico, por la de guerrillero y organizador excelente de guerrillas. Era un secreto, pero ya no lo es, recibieron armas de México. Se les enviaban en dos aviones un B´26 y un P.B. 2, comprados en El Paso Texas, como “surplus”. El P.B. 2 se desplomó en el aeropuerto militar de Ixtepec y allí permanecieron sus restos años y años. Al cabo de 12 años, los 12 guerrilleros ya eran varios miles. Cuba despertaba de un sueño de pesadilla, Esclavos del dinero, del juego, del vicio. Los cultivadores de caña eran explotados en forma inicua y despiadada. La lucha guerrillera se extendió de la Sierra Maestra a toda la Isla y se tornó incontenible. El día 31 de diciembre de 1958, el Dictador Batista anuncio a sus invitados a la cena de fin de año que “…llegó Fidel, y yo me voy…” y así lo hizo con su familia y las inmensas riquezas que había amasado. A partir de entonces, Cuba ha tenido un despertar encomiable, pese a que tuvo necesidad de romper con su Vecino del Norte, canal de por medio, sin que haya sido un gran obstáculo para ello el embargo al que ha estado sujeto la isla, por el que se le ha privado de casi toda ayuda y posibilidad de obtenerla después de la guerra fría entre los países de acá, contra el de allá. Sin embargo, es reconocida por los organismos internacionales como el país número 51 en el índice mundial de desarrollo, 4 el Latinoamérica, O.N.U); cuenta con un desarrollo sostenido Y sostenible, y humano alto W.W.F.); un Producto Interno Bruto y crecimiento real de 9.5%; número 1 en Latinoamérica en Sanidad, la medicina es gratuita para todos. 22 Facultades de Ciencias Médicas en la Isla garantizan la existencia constante de médico para todos; la menor tasa de mortalidad infantil en el mundo con 5.1 por millar; Una juventud sana y luchadora que cada olimpiada se lleva los honores, ya que con una población de diez millones, obtiene más de noventa medallas que, comparativamente es superior a la de los Estados Unidos de América que con 250 millones de habitantes sólo obtiene poco mas de 200 medallas. Tres tormentas ocurridas en los últimos diez años le han causado mucho daño que sin cejar repara día con día y, como repetición al ataque al Cuartel de Moncada, Fidel Castro nos ha regalado con un excelente discurso en el que ataca de frente todos los problemas que afronta hoy, la humanidad entera, discurso que merecidamente circula por Internet en forma increíble. En lo personal me lo han enviado ya más de tres amigos no propiamente admiradores del líder inmortal. Vaya este ensayo como un homenaje a la Revolución Cubana en el quincuagésimo séptimo aniversario de su real inicio.