Jueves 28 de junio de 2018.
Para
mi queridísima-Hermana-Madre, María Cristina Ortega Arenas, que hoy cumpliría ciento dieciocho años.
EL DEDO DE DIOS.
Es común en nuestro medio, utilizar como fórmula o solución de toda clase de problemas, señalar,
¡CON EL DEDO DE DIOS!
La alusión, deriva de la letra escrita en
nuestro Himno Nacional que señala esa barbaridad, que no es otra cosa, ya que
no tiene ningún fundamento y hoy se toma como si se tratara de una verdad contundente.
Las Autoridades mexicanas, cometen toda clase de atropellos
que, combatidos por los perjudicados, se atribuyen a ese “Dedo de Dios”, y con eso basta para que se estime legal.
¿A que Dios se refieren, si hay y ha habido “miles de dioses”.
Hemos atacado ya en varias ocasiones ese tema porque a todas las barbaridades que nuestras autoridades
civiles, y sobretodo militares, llevan a
cabo, las atribuyen al “Dedo de Dios”, frase que apareció la
letra en el texto de nuestro himno nacional que empleada de mala fe, ha
devenido en abusos sin límite.
Para nosotros, con esa sumisión que padecemos con respecto a nuestras autoridades,
a pesar de que tenemos pleno conocimiento de que en nuestra historia solo ha
existo una verdaderamente “electa”, Francisco I. Madero, que hizo el
milagro de llenar de esperanza al nuestro pueblo, que poco duró.
En la que llamamos “la
decena trágica”, un generalote , asesinó
a Madero y al Vice Presidente Pino Suárez y, volvimos a nuestra rutina.
No ha vuelto a suceder. Se inventó, si, SE INVENTÓ el siempre
vencedor, por la buena o por la mala, partido en el poder Interrumpido por un “sainete”
en el que “designamos presidente, al
gerente de la empresa transnacional “Coca Cola”, que desgobernó, con otro
pelele, dos sexenios seguidos, para
volver “al redil”.
Cuántos años más durará
la “farsa’’. Con el Ejército y “la Marina”, (muy lejos del mar y
de los barcos) al servicio de la “invisible dictadura” los apoye.
En lo personal tengo la idea de que ni mis nietos van a ver
un cambio.
NI MODO. EL DINERO,
ES PRIMERO.
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