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Joaquín
Ortega Arenas.
¿Quién que viva o visite la Ciudad de México, no ha oído nada del Barrio
de Tepito, Tecualhtepiton en la era Mexica? Su origen se remonta a la fundación de Tenochtitlan,
que según cuenta la Crónica, estaba ubicado en una de las orillas de la “Lagunilla”, una especie de bahía, en
la que los Mexica, obligaban a los pueblos que habían sometido a entregar las
aportaciones en especie con la que pagaban su tributo, que se almacenaban en la
ribera de la misma en tanto eran distribuidas en dónde, todavía hoy se
encuentra uno de los mercados más grandes de la Ciudad de México.
Como era de esperarse, pronto aparecieron, entre los individuos que
tenían como esclavos, los que encontraron una forma de sobrevivir en la sombra,
robando y vendiendo el producto de sus robos, desde luego más baratos que la
autoridad Mexica.
Gutierre Tibón tras años de investigación, encontró que el nombre
indígena de la isla de Pascua es “Te Pito - el ombligo del mundo" haciendo alusión a esa cicatriz del
nacimiento que marca el centro del cuerpo humano.
En la Ordenanza de Cuauhtemotzin, promulgada la tarde del
13 de agosto de 1521, justamente donde fue su última trinchera de lucha durante
93 días se edificó de la iglesia de San francisco en el popular barrio bravo en
donde al parecer le quemaron los pies.
“…Desde entonces, Tepito se ha caracterizado culturalmente
como: modesto barrio indígena, miserable enclave colonial, arrabal de la Ciudad
de los Palacios, abrevadero cultural de los chilangos, lugar de gestas y
gestos, afamado burgo artesanal, semillero de campeones de boxeo, ropero de los pobres, mercado de ocasiones,
bisagra del Centro Histórico y un auténtico barrio popular con su propia teoría
sociocultural convertida en conjetura urbana”
Este largo proemio, ha tenido por objeto ubicar el sitio en el
que, un Médico puso un consultorio, motivado porque cuando transitaba por la
avenida Peralvillo, ocurrió una riña con un lesionado grave que el galeno se
bajó a atender, “…porque ni las ambulancias de atreven a ir…”. El Consultorio
se convirtió en sitio de veneración de los “tepiteños”. El
Médico (q.e.p.d), me enviaba a sus protegidos para que los representara
judicialmente, cosa que sigo haciendo y hoy, 20 de agosto en que escribo este
blog, llegó uno de ellos con un problema, me lo expuso y después. me preguntó:
“Oiga mi Lic., a que no sabe que “Enrique” es
la causa del “Enriquecimiento” de muchísimos políticos…”.
Pasando
de la anécdota a las cosas serias, Praxedis G. Guerrero, Periodista y anarquista afiliado al Partido
Liberal Mexicano que murió en combate
contra las fuerzas federales de Porfirio Díaz al inicio de la Revolución
Mexicana, escribió:
“Es más cuerdo sacrificarlo todo y perecer
como una miserable rata para enriquecer a los amos que arriesgar la
vida para alcanzar la libertad y con ella el bienestar cierto, ¿no es así
sensatos pasivos?
Práxedis G. Guerrero.
De un Diario de Puerto Rico. (Estado Libre
Asociado de EUA), copié las siguientes líneas,
“…Es incontrovertible afirmar que la “Revolución
Mexicana” , no ha cumplido su proceso de llevar a las masas, a las grandes
masas nacionales, la justicia social, y si en cambio funesto, nos
encontramos hoy, ante una panorama en el
que presuntos agentes del imperialismo extranjero, persisten en demandar al
Estado para que se entreguen a los particulares las palancas de la economía de ese
país, funesta, bárbara, criminal idea, que esconde el verdadero deseo de abrir
las puertas al capital extranjero y que México quede desarmado para siempre
bajo los dictados de las empresas transnacionales, para enriquecer sólo
a unos cuantos en detrimento de la soberanía de la nación, puesto que al fin y
al cabo el capital no tiene patria.
Sólo los insensatos, ciegos inconscientes,
guiados por ciegos conscientes o cínicos y descarados son capaces de hacerlo…
Al así hacerlo declaramos: Que el sistema
democrático es fundamental para la vida de la comunidad puertorriqueña; Que
entendemos por sistema democrático aquel donde la voluntad del pueblo es la
fuente del poder público, donde el orden político está subordinado a los
derechos del hombre y donde se asegura la libre participación del ciudadano en
las decisiones colectivas; Que consideramos factores determinantes en nuestra
vida la ciudadanía de los Estados Unidos de América y la aspiración a
continuamente enriquecer nuestro acervo democrático en el disfrute
individual y colectivo de sus derechos y prerrogativas...
La palabra cantada, entre otras
estrategias creativas, constituye una respuesta dentro del múltiple abanico de
posibilidades existentes para enriquecer el entusiasmo del educando
por una clase de español que no sólo le resulta útil, sino llena de
proyecciones divertidas para su personalidad en creciente.
No se extrañen pues, quienes dictaminan
desde sus alturas de momento que los estudiantes no sepan enriquecer su
vocabulario, no entiendan lo que leen y tanto su redacción como su ortografía
demeriten las ostentaciones sofisticadamente modernizadas de la educación”.
Y, relativo al
“Enriquecimiento, leí,
“,,,Antes mirarás hermosas que bobas
en esta ciudad, que tiene fama de tener las más discretas mujeres de España, y
que andan a una su discreción con su hermosura; y si no, míralo por Costancica,
de cuyas sobras de belleza puede enriquecer no sólo a las hermosas desta
ciudad, sino a las de todo el mundo.
Miguel
de Cervantes Saavedra
¡Qué cosas tan
interesantes¡ ¿No?