1/15/2013

MITOS…



Joaquín Ortega Arenas.

¡Qué contrastes tan extraños tiene la vida! Leíamos, como solemos hacerlo con frecuencia, la inconmensurable poesía de Juana Inés de Asbaje,  conocida como Sor Juana Inés de la Cruz y tuvimos que detenernos una vez más en aquel  soneto que dedicó a una pintura que de ella hizo el genial pintor oaxaqueño Miguel Cabrera, allá por el ya lejano Siglo XVII…
Éste que ves, engaño colorido,             
que, del arte ostentando los primores,
con falsos silogismos de colores             
es cauteloso engaño del sentido;
éste, en quien la lisonja ha      pretendido
excusar de los años los horrores,
y venciendo del tiempo los rigores             
triunfar de la vejez y del olvido,

es un vano artificio del cuidado,             
es una flor al viento delicada,
es un resguardo inútil para el hado:             

es una necia diligencia errada,
es un afán caduco y, bien mirado,             
es cadáver, es polvo, es sombra, es nada.
y sin pensarlo más, nos llevó a nuestra querida Patria, a nuestra democracia, a nuestro sistema de gobierno, a nuestra vida toda .
 ¿No es acaso la “Democracia” a la mexicana un “engaño colorido”? ¡Seamos sinceros con nosotros mismos! ¿Cuándo hemos disfrutado de aquello que Abraham Lincoln resumió como “El gobierno del pueblo por el pueblo y  para el pueblo”?   Nuestro pueblo siempre ha estado ausente en los tejemanejes que  el poder de las armas y el poder del dinero han dominado nuestro devenir político desde 1521, hasta los albores del 2013.
Con “pueblo” sumido en la ignorancia por la carencia de oportunidades para lograr un mejoramiento; sin escuelas, (el rústico Fox cerró las normales rurales porque “son focos de agitación”); el liderazgo vitalicio mantiene miles de “maestros” sin alumnos; los programas de estudios son ya obsoletos. Escapan de esta situación, por esfuerzo propio la UNAM,  el IPN y quizá,  una o dos universidades perdidas entre centenares o miles de centros educacionales “patito”,  enriquecidos por la falta de capacidad gubernamental  para afrontar ese gravísimo problema.
Un pueblo muerto de hambre, con más de las tres cuartas partes de la fuerza de trabajo expulsadas de sus tierras ancestrales y obligadas a vivir y trabajar en el extranjero por falta de oportunidades en “su patria”;  la producción agropecuaria en eterna crisis; mas del 80% de lo que el País producía …hoy se importa, ¡hasta el maíz! De Aquella bella metáfora de nuestro Poeta Ramón López Velarde…
Patria: tu superficie es el maíz,
tus minas el palacio del Rey de Oros,
y tu cielo, las garzas en desliz
y el relámpago verde de los loros.
El Niño Dios te escrituró un establo
y los veneros del petróleo el diablo.
Sobre tu Capital, cada hora vuela
ojerosa y pintada, en carretela;
y en tu provincia, del reloj en vela
que rondan los palomos colipavos,
las campanadas caen como centavos.
¡nada queda ya! Las minas  “…el palacio del rey de oros…”  se han “regalado” por nuestros brillantes gobernantes a extranjeros, mediante el sistema de “rentar” por $500.00 cada hectárea de superficie,  para su explotación. “El establo” ya no existe, acabaron con ellos grandes monopolios “ALPURA” de Arturo Montiel y la familia Hank, y “LALA”,  de un grupo de inversionistas israelíes.    Los veneros de petróleo que nos legó “el diablo”, “gracias a Dios” se los estamos entregando a los extranjeros.   Sobre nuestra capital, ya no vuelan las horas…las  perdemos estacionados en cualquier parte a cualquiera hora…y los palomos colipavos que rondaban  los campanarios provincianos,  ya no existen…los hambrientos los cazan para tener que comer. Las campanadas,  ya los centavos solo existen en nuestros museos “numismáticos”.
El verdadero pueblo, de clase medieros para abajo en las escalas sociales,  perseguido por los detentadores del “poder” con impuestos sinfín,  represiones tipo 1 de diciembre de 2012, extorciones mil,…..multas, alza de impuestos por tener algo o por no tener nada,  por hacer y por no hacer ….prohibiciones estúpidas de todo tipo….han dejado “nuestra democracia” como…
… una necia diligencia errada,
es un afán caduco y, bien mirado,             
es cadáver, es polvo, es sombra, es nada….

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