LA HISTORIA VUELVE A REPETIRSE

Joaquín Ortega  Arenas,

Existieron en Mesoamérica desde tiempos inmemoriales, mercados que funcionaban mediante el sistema de “trueque”,  a los que denominaban “tianquistli”  a los que nuestro padre, en su afán por interiorizarnos en la historia de México, nos llevó a conocer.  El mas maravilloso que encontré en esos viajes, fue el de Chilapa, en el Estado de Guerrero, que según datos fidedignos, tenía ya MAS DE 500 AÑOS FUNCIONANDO, en su estado original, con “trueque”  y casi sin dinero, hasta que la alta cultura de nuestros gobernantes, casi lo ha convertido en un “supermarket”.

En el Estado de México,  se ubica en el Pueblo de Santiago, uno de los pocos  que sobreviven “al progreso” y a la ofensiva yanqui  de los “Supermarket” y  ………….que la tradición ha denominado Santiago Tianguistenco” (“tianquistli”, mercado, tenco, lugar del).  Vale la pena visitarlo, los lunes, que es día de plaza.

A todo lo largo y a lo ancho del País, existen todavía muchos mercados  (“tianquistli”), que hoy llamamos “mercados sobre ruedas”.

En la Ciudad de Tenoxtitlan hoy México, que fue fundada según las cifras mas aceptables, el 26 de julio de 1325 (calendario gregoriano),  y es hoy  Capital de la República Mexicana, funcionó un “Tianquistli”  durante mas de 400 años, en el sitio que hoy ocupa la Suprema Corte de Justicia. al que denominaban “Mercado del Volador”, en el que se comerciaba  con toda clase de mercancías, muchas de ellas de dudosa procedencia,  aledaña al lugar que fue el centro de la civilización “Mexica”,   sobre una superficie de 46800 metros cuadrados, en la que se construyó  el Zócalo, un basamento para conmemorar la Constitución de Cádiz de 1812, limitado por el oriente por el Palacio Virreinal, sede de las autoridades máximas;  por el Norte, por la Catedral Metropolitana, sede de  la máxima jerarquía eceseástica, por el sur, las casas del Ayuntamiento y el gobierno local;  por el poniente, el Portal de Mercaderes  y,  siempre había  sido destinada esa superficie  para la celebraciones y reuniones cívicas y religiosas .

Testigo mudo de nuestra historia, hoy, por obra y arte de la mercadotecnia ha vuelto al destino comercial que existía en el “Volador” pero, hoy ocupando el total de la superficie del llamado “Zócalo” y cambiando su destino al  de teatro, a salón de baile, playa artificial, alberca,  y comercio en general, o lo que sea…, cambio que suponemos obedece a la necesidad que tienen nuestros “cultos” gobernantes  de tener a los habitantes de esta sufrida y hoy monstruosa ciudad ocupados en estos problemas para  que olviden  a la antes “Ciudad de los Palacios” y se conformen  con sus estrechas calles y flamantes Viaductos y Periféricos convertidos  en eternos   “ESTACIONAMIENTOS  DE AUTOMOTORES”,  que han transformado  nuestra ciudad,  antes  “la región mas transparente del aire”, como la bautizara el Maestro Alfonso Reyes, en fábrica de enfermedades pulmonares,  encharcamientos,  baches que parecen trampas para elefantes y lo peor, con una inseguridad que ha llegado hasta los mas altos estratos de nuestra política,  originando rejas móviles por  donde quiera, para  BLINDAR LA CALLES , EDIFICIOS IMPORTANTES Y PLAZAS, y permitir a nuestros próceres un tránsito seguro y veloz.

No hay día en que nuestro querido “zócalo”  esté libre y abierto para los mexicanos que lo seguimos considerando “LA PLAZA DE LA CONSTITUCIÓN”,  lo que ha dado lugar a que no falte niño o joven que piense que como esta la PLAZA,  está LA CONSTITUCIÓN, “convertida en mercado, playa artificial, salón de Baile , prisión instantánea…, o en obra para su inminente cambio de “uso del suelo”.

                                                   ¡ MAL,  MAL, MAL Y MAL!