Joaquín
Ortega Arenas.
Estaba
preparándome para las ya inminentes “vacaciones” del Poder Judicial Federal,
guardando papeles, cuando el sonido molesto y penetrante del teléfono me
distrajo. Era un viejo amigo que me anunciaba una noticia ¡INCREIBLE!
que, mediante correo personal me acababa de enviar a mi domicilio.
No había
transcurrido una hora, y el mensajero llegó y me hizo entrega de una nota
periodística, publicada por “Notimex” que trascribo de inmediato
por su importancia para todos los mexicanos.
El Señor Presidente de la Suprema Corte de Justicia
de la Nación, y del CONSEJO DE LA JUDICATURA FEDERAL MINISTRO LUIS MARÍA
AGUILAR MORALES, dijo al inaugurar
el Primer Encuentro Nacional de Coordinadores de Jueces de Distrito y
Magistrados de Circuito,
que es,
“…responsabilidad del CONSEJO DE LA JUDICATURA FEDERAL garantizar las
condiciones de independencia que necesitan para que ejerzan sus funciones
con toda dignidad”.
El mensaje completo señala:
“México requiere jueces
independientes que den viabilidad y certidumbre, no juzgadores que comprometan
su criterio al servicio de intereses ajenos a la impartición de justicia.
México requiere jueces
independientes que den viabilidad y certidumbre, no juzgadores que comprometan
su criterio al servicio de intereses ajenos a la impartición de justicia.
El también presidente de la Suprema Corte de
Justicia de la Nación (SCJN) sostuvo que:
“sin independencia el juez es cualquier cosa
menos un juez; será el escribiente de alguien, el mandadero de alguien,
pero no un juez”.
“más allá del discurso, como
jueces y magistrados nos toca hacer realidad esa defensa de los derechos
humanos y, por lo tanto, creo que es muy importante que todos ustedes,
como lo son, estén convencidos de esta gran responsabilidad y de esta labor”.
“Ustedes, jueces y magistrados,
constituyen la parte sustantiva del Poder Judicial de la Federación y
este cuerpo colegiado está para coadyuvar al buen cumplimiento de sus tareas
sustantivas que realizan los juzgadores federales”.
Lo que el país necesita son
jueces y magistrados convencidos de que su labor tiene un mérito, sentido y
utilidad”,
No olvidar que son los juzgadores federales
los que establecen, muchas veces, la etapa final de la justicia que la sociedad
está esperando.
“el máximo valor del
correcto desempeño jurisdiccional es con los justiciables, quienes confían
en que se protejan sus derechos y les hagan justicia.
Prueba de ello es que del más
de un millón de asuntos que cada año ingresan a los juzgados y
tribunales federales, 95 por ciento son amparos “en los que se valora, defiende
y se hace respetar los derechos de las personas; o sea, el juicio de amparo”,
.
(Con información
de Notimex).
Tengo ya, setenta y cuatro años fustigando
mediante la Prensa, las conductas ilícitas de los funcionarios judiciales.
Durante cinco años publiqué una revista “INJUSTICIA”,
en la que conté con la colaboración de Jurisconsultos de primera línea, como
don Alberto Vázquez del Mercado, (que mes con mes, acudía personalmente a
dejarme su artículo), Vicente Aguinaco
Alemán, Manuel G. Escobedo, Ramón Sánchez Medal, Fernando Coronado,
Eugenio Trueba Olivares y muchos, muchos más abogados de prestigio nacional.
Han dejado en mí una profunda huella en forma muy
especial, las palabras pronunciadas por el Juez de Distrito del Estado de
México, Lic. Darío Maldonado Zambrano a
los reporteros del “Sol de Toluca” el 21 de agosto de 1974, con motivo de haber
sido suspendido por la Suprema Corte de Justicia por haber encarcelado a uno de
los contrabandistas protegidos por el Gobernador del Estado:
“…es
preciso reivindicar la honestidad y rectitud del funcionario, y más que esto,
es imperante preservar la Constitución General de la República para que no sea
pisoteada por ningún funcionario que ostenta el poder: debemos luchar porque se
respete la División de Poderes”
“…Todos
los jueces del País debemos ajustarnos a la recta actuación jurídica sin miedo
y sin temor a nada ni a nadie. Porque estamos actuando bajo los preceptos de
nuestra Constitución y de las leyes
emanadas de la misma…”
La Revista
salió de la circulación porque la Secretaría de Gobernación me aplicó la
“Ley
de Imprenta mexicana”, es decir, me retiraron la dotación de papel al mismo
tiempo que se la retiraron a Don Manuel Marcué Pardiñas para que cesara de
circular su Revista “Política”.
He sido, profesionalmente, víctima de una terrible
persecución por los “inmarcesibles” funcionarios judiciales y, sin embargo, hijo,
nieto, bisnieto y tataranieto de abogados,
(cuatro de ellos Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación), así seguiré mientras tenga vida.
¡ESTE ES
MI DESTINO!
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